Café espresso vs café lungo: ¿en qué se diferencian?
El Espresso es la máxima esencia del café solo, una bebida llena de cuerpo y crema que te permite saborear hasta el último matiz de un grano de calidad, habitualmente procedente de una de las variedades de café más populares: el café arábica.
Para prepararlo, se utilizan aproximadamente 50 ml de agua, una cantidad pequeña que da como resultado un café concentrado pero que no necesariamente tiene que tener cafeína. Y es que un espresso descafeinado es una opción “sin” con la que podrás seguir disfrutando de todo el sabor de un café.
Por su parte, el café largo o lungo es perfecto para quienes quieren alargar su taza y disfrutar del sabor por más tiempo gracias a su gran contenido de agua (unos 120 ml) y a las amplias opciones de degustación: clásico, Grande Intenso
Si eres un fanático del café, estamos seguros de que cualquiera de estas dos opciones te encantará, porque, no solo están buenísimas en su tradicional versión caliente, sino que también son perfectas para beberlas frías, ¡te contamos más!
Café helado vs affogato: los grandes clásicos del verano
Con la llegada del buen tiempo también llegan las variantes frías del café, tipos que seguro has probado o escuchado alguna vez: café helado, freddo, affogato… pero, ¿cuáles son sus diferencias?
El café helado, o freddo en italiano, es un café espresso con hielo que se suele tomar solo pero también se puede acompañar con lácteos, aromatizantes o siropes. ¿Necesitas ideas? Prueba sus múltiples formas: con cubitos de café dentro de la leche, con un chorrito de nata para darle consistencia, granizado con hielo picado o con una rodaja de limón. Y si, además del café, lo que más te gusta es el helado, ¡sigue leyendo!
El affogato es un postre italiano que combina una bola de delicioso helado con una taza de espresso caliente. Si quieres preparar tu affogato perfecto apunta estos tips:
- Congela una copa o taza e introduce una bola de helado en su interior. Tradicionalmente se prepara con helado de vainilla, pero puedes utilizar cualquier otro sabor suave que no robe el protagonismo al café: nata, caramelo, chocolate blanco…
- Prepara un espresso sin azúcar y, cuando esté templado, viértelo encima del helado.
- Puedes añadirle nata, virutas, barquillos o cacao en polvo para decorar.
Y recuerda que las versiones frías son mejores recién hechas así que ¡consúmelas enseguida!
Café cappuccino vs café latte: las variedades con leche preferidas
¿Te apetece un delicioso café con leche pero no sabes con cuál quedarte? Te proponemos que escojas entre uno de estos dos grandes conocidos que no te defraudarán.
El caffe latte es una variante del café con leche que se caracteriza por contener una gran parte de leche cremosa y un menor contenido de café, lo que lo hace suave y un poco denso. Por su parte, el café Cappuccino se puede distinguir por su espuma de leche, mucho más ligera que la crema del latte y que, debido a su textura aireada, le proporciona más volumen aun teniendo una menor cantidad de leche.
Ambos se pueden saborizar con vainilla, cacao o canela, entre otros, para darles un toque diferente. Así que, si aún tienes dudas entre estas dos exquisitas clases de café, solo queda responder a esta pregunta: ¿crema o espuma?
Café mocha vs. café macchiato: ¿café o chocolate?
Un Mocha o moka café es la conjunción perfecta entre café, leche y chocolate. Una combinación excelente entre un café con leche cremoso y los matices aromáticos del cacao, que pueden incluirse por medio de sirope, polvo o chocolate caliente.
Por su parte, un macchiato incluye solo los dos primeros ya que se compone de un espresso “manchado” con leche. Pero eso no es excusa para los amantes del chocolate, porque si prefieres apreciar mejor el café sin renunciar a él… ¡apuesta por maridarlo con unas deliciosas trufas!
Ahora que puedes diferenciar estos tipos de café como un verdadero experto, no te pierdas nuestro post ¿Qué variedad de café prefieres? donde te ayudamos a detectar cuál es el café perfecto para ti contestando a unas simples preguntas, ¡descúbrelo!