DESCUBRE CÓMO HACER ESPUMA DE LECHE PARA TU CAFÉ EN CASA

Imagina que te encuentras bajo un árbol de café. Debes seleccionar únicamente los mejores granos, ¿en qué te fijas? En los mejores frutos. Requiere paciencia, pero cuando alcanzan el punto de madurez perfecto siempre resulta emocionante.

Mmm... el tueste. Ese momento en que emanan sus maravillosos aromas y el café adquiere cuerpo. Los diferentes granos requieren diversos niveles de tueste, por ello calibramos constantemente los tiempos y las temperaturas para asegurarnos de que el resultado sea perfecto.

- Ligero: Preserva los aromas afrutados y la acidez, y ofrece un cuerpo más ligero.

- Medio: Desarrolla unos aromas más equilibrados con menor acidez y un cuerpo de consistencia media.

- Oscuro: Un cuerpo denso y una acidez baja.

Una vez que los granos están listos, llega el momento de combinarlos. Los diferentes granos de las distintas regiones presentan unos matices diferentes. Las mezclas se realizan según su carácter. Y cuando conseguimos el equilibrio perfecto, surge la magia.

La molienda desarrolla aún más esos aromas de NESCAFÉ® Dolce Gusto® que te encantan. Los granos se muelen de forma gruesa o fina según el tipo de café...

- Molienda fina para el café corto: Permite una extracción óptima de los aromas del café.

- Molienda gruesa para el café largo: Los aromas se extraen suavemente, preservando igualmente su calidad para los cafés largos.

Una vez molido, lo mantenemos fresco. Envasamos cuidadosamente cada mezcla en nuestras cápsulas inteligentes patentadas, sellándolas con precisión para garantizar que los sabores y aromas conserven su frescura, y tú puedas disfrutarlos.

El último paso es nuestro favorito. El momento en el que bebes un sorbo de este increíble café recién preparado, y saboreas la pasión con la que nos entregamos en el proceso. Para nosotros, el modo en el que llega hasta ti es importante. Siempre.

La espuma de leche se consigue aireando la leche líquida hasta transformarla en pequeñas burbujas que aportarán un toque de cremosidad y esponjosidad extra a tu café. Algo así como una nube encima de tu taza que, además, servirá para equilibrar sabores tan opuestos como el amargor del café y la suavidad de la leche.

Sin embargo, no hay que confundir la espuma de leche con la crema o la nata. Para poder diferenciarlas, debes saber que la espuma de leche es mucho más vistosa y, si está bien hecha, debe ser de color y aspecto homogéneo, firme y persistente, y con una textura muy cremosa y suave.

Y si te quedan dudas, no te pierdas nuestro post sobre los secretos de un café espumoso y aprende a diferenciarlos ¡a la primera!

Además, una buena espuma de leche no restará disfrute a tu café, sino que le sumará aroma y sabor, sin que por ello tengas que renunciar a los matices, olores y texturas de tus variedades favorita. ¿Te atreves a hacer la prueba?

La leche que elijas para hacer la espuma será clave para conseguir un sabor y textura adecuados.

Aunque pueda parecer que la espuma de leche solo está al alcance de los baristas más expertos, lo cierto es que el proceso de preparación es mucho más sencillo de lo que crees. Existen diferentes métodos, así que puedes probar hasta encontrar el que te dé mejores resultados o te resulte más cómodo:

La leche que elijas para hacer la espuma será clave para conseguir un sabor y textura adecuados.

Si quieres disfrutar de la espuma de leche sin perder ni un solo minuto, apuesta por alguna de nuestras especialidades pensadas especialmente para ello como el Capuccino o el Latte Machiatto, combinaciones perfectas que mezclan el aromático café espresso con la cremosidad de la leche. Solo tienes que introducir la cápsula de leche y, después la de café, y tu cafetera Dolce Gusto hará el resto. Disfruta de un café lleno de sabor ¡y espuma!

La leche que elijas para hacer la espuma será clave para conseguir un sabor y textura adecuados.

Si eres de los de la vieja escuela, puedes preparar tu propia espuma de leche de forma manual. Solo necesitas poner 170 ml de leche en un recipiente del doble de capacidad (recuerda que la leche se expandirá al espumarla), cerrarlo herméticamente y agitarlo durante 30 segundos.

Calienta el resultado en el microondas sacándole la tapa ¡y voilà!, tu espuma de leche casera preparada para coronar un delicioso y espumoso café.

Además, existen diferentes accesorios de cocina que pueden ayudarte a hacer espuma de leche en casa como los espumadores, las jarras espumadoras o las batidoras. Con cualquiera de estos utensilios conseguirás resultados de forma fácil y rápida.

Atrévete y sorprende a tus invitados con el toque de distinción que da la espuma de leche a una taza de buen café.

La leche que elijas para hacer la espuma será clave para conseguir un sabor y textura adecuados.

Aunque hay otras opciones que veremos más adelante, la leche entera es, sin duda, la mejor elección. ¿La razón? La leche entera, pese a haber pasado por un proceso de esterilización, es el tipo de leche que más componentes conserva, y, por tanto, que más contenido de grasa mantiene, uno de los ingredientes imprescindibles para hacer espuma de leche. La grasa es beneficiosa en este aspecto porque asegura la cremosidad de la mezcla. Además, y si quieres conseguir una espuma de leche de sabor todavía más intenso, puedes optar por las diferentes opciones de leche fresca que cada vez están más presentes en los supermercados.

Este tipo de leche ha sido, incluso, menos tratada que la leche entera y, por tanto, tiene un contenido graso mayor que puede llegar hasta el 5%..

Pero no te desesperes si prefieres las leches vegetales, ¡porque también hay opciones para ti si quieres hacer espuma de leche! En este caso, tendrás que buscar aquellas leches vegetales que contengan más grasa para facilitar su emulsión.

Con las que mejores resultados obtendrás son la leche de soja y la leche de avena por su alto contenido graso, seguidas de la leche de almendra. Sin embargo, olvídate de otros tipos como la leche de arroz pues tiene pocas proteínas y grasas, lo que dificulta enormemente conseguir una espuma consistente.

Y si quieres descubrir los secretos de otra de las combinaciones clave para darle más sabor a tu taza, no te pierdas nuestro post sobre Agua y café: una pareja inseparable, ¡te encantará!